La Inspección de Trabajo y Seguridad Social ha comenzado una nueva campaña contra el fraude en los contratos fijos discontinuos, con especial atención en los sectores turísticos y agroalimentario. Se estima que en España hay alrededor de 140.000 trabajadores en esta situación contractual.

¿Qué son los contratos fijos discontinuos?

Los contratos fijos discontinuos son aquellos que se utilizan para cubrir necesidades de personal que son estacionales o intermitentes, como puede ser el caso del sector turístico o agroalimentario. Es decir, se trata de contratos que se firman por una duración determinada, pero que se interrumpen durante ciertos periodos del año y se reanudan más tarde.

En el caso de los contratos fijos discontinuos, se prestará mucha atención a los periodos de inactividad, ya que estas son situaciones que pueden utilizarse para ocultar la falta de contratos a tiempo completo.

¿Por qué son objeto de fraude?

A pesar de su uso legítimo, estos contratos se han convertido en un objeto de fraude para algunas empresas. En muchos casos, las empresas utilizan estos contratos para cubrir necesidades que no son estacionales ni intermitentes, sino que se prolongan durante todo el año. Además, también se han detectado irregularidades en la duración de los periodos de inactividad y en las causas que justifican la interrupción de los contratos.

Esta modalidad de contrato se usa por las empresas para ocultar la falta de contratos a tiempo completo. Es decir, en lugar de contratar a un trabajador a tiempo laboral que le corresponde, la empresa contrata a varios trabajadores con contratos fijos discontinuos que comparten las horas de trabajo.

Según los datos del Ministerio de Trabajo y Economía Social de España, en 2020 se registraron 571.700 contratos fijos discontinuos en el país. Y para diciembre de 2022 la cifra explota en 964,05% sosteniendo un número de contratos que han superado la cifra de 600.000 y hoy en el 2023 sigue en incremento alarmante.

Las empresas bajo el radar de la Inspección de Trabajo

La Inspección de Trabajo y Seguridad Social ha puesto el foco en las empresas que utilizan los contratos fijos discontinuos de manera fraudulenta. Según la dirección general de la Inspección de Trabajo, la campaña se centrará en aquellos sectores donde se ha detectado mayor abuso de esta modalidad contractual.

Una vez que la Inspección de Trabajo identifica una empresa que incumple las normas laborales, inicia una investigación para determinar el alcance y la gravedad de la infracción. Esto puede implicar entrevistas con los empleados, la revisión de los registros de pago y de horarios, y la visita a las instalaciones de la empresa.

Esta campaña se produce en un momento en que la economía española está luchando por recuperarse de los efectos pospandemia y la inestabilidad económica que afecta a Europa en los últimos tiempos. Muchas empresas han tenido que hacer frente a una disminución de la demanda y han reducido sus plantillas.

Sin embargo, el hecho de que una empresa esté pasando por dificultades económicas no la exime de cumplir con las normas laborales. La Inspección de Trabajo está comprometida a proteger los derechos de los trabajadores y a garantizar que se les pague lo que se les debe.

¿Qué sanciones enfrentan las empresas infractoras?

Las empresas que sean sancionadas por utilizar los contratos fijos discontinuos de manera fraudulenta pueden enfrentar multas de hasta 6.250 euros por trabajador afectado. Aunque en casos graves se pueden imponer sanciones de hasta 187.515 euros. Y enfocándose en las leyes, la Inspección de Trabajo también puede obligar a las empresas a regularizar la situación contractual de los trabajadores afectados.

Las empresas que incumplen las normas laborales pueden sufrir una merma de su reputación. La imagen pública de una empresa puede verse afectada negativamente si se descubre que ha estado incumpliendo las normas laborales.

La Inspección de Trabajo cuenta con diferentes herramientas para llevar a cabo sus inspecciones, como el derecho de acceso a los locales y lugares de trabajo, el derecho a requerir documentos y a recabar información, o la posibilidad de realizar pruebas de trabajo para verificar las condiciones laborales.

Consejos para evitar el fraude en los contratos fijos discontinuos

Para evitar el fraude en los contratos fijos discontinuos, las empresas deben asegurarse de que las necesidades de personal son realmente estacionales o intermitentes. Además, también es importante que se respeten los periodos de inactividad y que se justifiquen las causas que motivan la interrupción del contrato. En este sentido, es fundamental que se registren todas las horas trabajadas por los empleados. Y que se lleve un control exhaustivo de las fechas de inicio y finalización de los contratos.

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